El domingo pasado hice algo que hace mucho el cuerpo me había pedido dejar de hacer... Que es hacer un viaje en Cole ida y vuelta en el día.
Fui a Córdoba desde Santa fe (6 horitas contando el Cole de línea también) cuál adolescente a escuchar a una artista que me encanta. Con cuarenta vueltas alrededor del sol, y teniendo que trabajar el lunes... La espalda me recordó el porque no lo hacía.
El recuerdo fluorescente serán mis lágrimas y sonrisas al escuchar a Guada en vivo en primera fila... El abrazo y su sonrisa al final... sus palabras diciendo que nos recordaba a cada uno del recital del año pasado.
compartiendo estos sentipensares, antes también extrañaba todo de mi tierra, al nivel de las lágrimas por un cañoncito con dulce de leche, un sanguchito de miga o una pizza de verdura y bechamel.
Me angustiaba pensar que ese proceso de "enfriamiento emocional" me haya desarraigado por ya no sentir a esa flor de piel...
Mi anécdota fluorescente es haber podido reproducir el sabor casi intacto de una torta de cumpleaños para el ser que me acompaña en este camino hace tantos años... nada puede hacernos mal 🎶🎵
me encanta..... dijiste cañoncito de dulce de leche y se me empañaron los ojos. ese enfriamineto emocional, creo que es, mirar y sentir las cosas más 360, no hay qeu temerle:) te abrazo
El valor de esa torta de cumpleaños me hace pensar que quizás no sea enfriamiento. Tal vez sea crecer, a lo mejor es una especie calidez a la distancia, un calorcito que no quema y que ilumina.
También me fui de la que era mi ciudad. No tan lejos, al interior. A otra vida. Me gusta pensar que no es frialdad, es amor con perspectiva
Me fui a Chile a un encuentro de teatro espontáneo hermoso que esperaba con ansias , a sabiendas que me perdía de ver a la entusiasta más copada del condado! Pero aún no tengo el súper poder que quiero desde chica : estar a la vez disfrutando de varios eventos amados.
Acá haciendo un gran esfuerzo por vislumbrar alguna anécdota fluorescente en una semana que fue algo gris desde lo anímico, o al menos eso recuerdo. De pronto se me vino a la mente la sensación del jueves, cuando después de la clase de yoga que tomo por Saavedra, metí un pie en el estanque del patio que estaba lleno esta vez. Agua fresca y revitalizante. Fue un pequeño despertar y recordatorio de que algunas pequeñas cosas valen mucho. Esta semana sumergiré los dos pies.
Gracias Guada por estas newsletters, las disfruto mucho y fue hermoso verte y escucharte en La Trastienda :)
Mi anécdota fluorescente fue tomar mate en la terraza, esa que podría haber sido cualquier otra, en cualquier parte del mundo, pero en esencia nos hubiera encontrado debatiendo de la vida y las ideas de igual manera, con puchos prendidos y apagados, a medio pitar. Una terraza, ésta en particular que tiene todo lo que lo hace familiar, las plantas, el horno de barro y la magia del cielo atardeciendo, pero sobre todo lo ingrávido de nuestros encuentros atemporales a lo largo del tiempo. Es lo que tiene de particular la conversación, son como agujas que van tejiendo. ideas de antes y de ahora que se entrelazan intentando descifrar nuevas.
Bonita reflexión...Muchos nos sentimos de aquí y de allá ...sobretodo si somos inquietos. 😉 ¡Me ha encantado el trocito de canción!. Gracias por compartir.
El domingo pasado hice algo que hace mucho el cuerpo me había pedido dejar de hacer... Que es hacer un viaje en Cole ida y vuelta en el día.
Fui a Córdoba desde Santa fe (6 horitas contando el Cole de línea también) cuál adolescente a escuchar a una artista que me encanta. Con cuarenta vueltas alrededor del sol, y teniendo que trabajar el lunes... La espalda me recordó el porque no lo hacía.
El recuerdo fluorescente serán mis lágrimas y sonrisas al escuchar a Guada en vivo en primera fila... El abrazo y su sonrisa al final... sus palabras diciendo que nos recordaba a cada uno del recital del año pasado.
ay ..... un fuerte abrazo!!!!
Qué hermoso
compartiendo estos sentipensares, antes también extrañaba todo de mi tierra, al nivel de las lágrimas por un cañoncito con dulce de leche, un sanguchito de miga o una pizza de verdura y bechamel.
Me angustiaba pensar que ese proceso de "enfriamiento emocional" me haya desarraigado por ya no sentir a esa flor de piel...
Mi anécdota fluorescente es haber podido reproducir el sabor casi intacto de una torta de cumpleaños para el ser que me acompaña en este camino hace tantos años... nada puede hacernos mal 🎶🎵
me encanta..... dijiste cañoncito de dulce de leche y se me empañaron los ojos. ese enfriamineto emocional, creo que es, mirar y sentir las cosas más 360, no hay qeu temerle:) te abrazo
Gracias por esta charlita.
El valor de esa torta de cumpleaños me hace pensar que quizás no sea enfriamiento. Tal vez sea crecer, a lo mejor es una especie calidez a la distancia, un calorcito que no quema y que ilumina.
También me fui de la que era mi ciudad. No tan lejos, al interior. A otra vida. Me gusta pensar que no es frialdad, es amor con perspectiva
Me fui a Chile a un encuentro de teatro espontáneo hermoso que esperaba con ansias , a sabiendas que me perdía de ver a la entusiasta más copada del condado! Pero aún no tengo el súper poder que quiero desde chica : estar a la vez disfrutando de varios eventos amados.
Acá haciendo un gran esfuerzo por vislumbrar alguna anécdota fluorescente en una semana que fue algo gris desde lo anímico, o al menos eso recuerdo. De pronto se me vino a la mente la sensación del jueves, cuando después de la clase de yoga que tomo por Saavedra, metí un pie en el estanque del patio que estaba lleno esta vez. Agua fresca y revitalizante. Fue un pequeño despertar y recordatorio de que algunas pequeñas cosas valen mucho. Esta semana sumergiré los dos pies.
Gracias Guada por estas newsletters, las disfruto mucho y fue hermoso verte y escucharte en La Trastienda :)
Mi anécdota fluorescente fue tomar mate en la terraza, esa que podría haber sido cualquier otra, en cualquier parte del mundo, pero en esencia nos hubiera encontrado debatiendo de la vida y las ideas de igual manera, con puchos prendidos y apagados, a medio pitar. Una terraza, ésta en particular que tiene todo lo que lo hace familiar, las plantas, el horno de barro y la magia del cielo atardeciendo, pero sobre todo lo ingrávido de nuestros encuentros atemporales a lo largo del tiempo. Es lo que tiene de particular la conversación, son como agujas que van tejiendo. ideas de antes y de ahora que se entrelazan intentando descifrar nuevas.
..... gracias
Hola. Ni de aquí ni de allá ...me representa xq igual vivo en otro país. Amé el escrito. Y la canción obvio. Copiare un poquito y al insta ;) cariños
abrazos fuertes!
¿Qué standup viste? Por favor, contá. Me encanta el género, pero hay que seleccionar MUCHO.
Bonita reflexión...Muchos nos sentimos de aquí y de allá ...sobretodo si somos inquietos. 😉 ¡Me ha encantado el trocito de canción!. Gracias por compartir.
gracias a ustedes!